Nos merecemos vivir en una sociedad en la
que nadie sea súbdit@, en la que ninguna mujer sea agredida hasta morir
asesinada por serlo y en la que cada pueblo pueda decidir su futuro. Nos
merecemos una sociedad que respete la dignidad animal y el entorno natural. Una
sociedad que vele por los derechos de la clase trabajadora donde la explotación
no tenga lugar y en la que el modelo humano no sean banqueros responsables de
300 desahucios al día, evasores de impuestos o mafiosos. Nos merecemos vivir en
una sociedad en la que ejercer derechos fundamentales o exigir justicia no
suponga ser perseguido y secuestrado por las fuerzas y cuerpos de seguridad del
Estado. Nos merecemos una sociedad donde nuestra palabra valga tanto como la
del otr@ y no haya lugar para que nadie decida por nadie, que tod@s tomemos la
riendas de nuestra vida fruto de la responsabilidad sobre ella. Nos merecemos
un futuro para nuestr@s hij@s y un presente digno para cada un@ de nosotr@s.
No perderemos el tiempo enumerando una vez
más la corrupción de la monarquía y del Estado; desde la judicatura hasta el
ejército, desde los dos sindicatos mayoritarios hasta la iglesia, desde la
partitocracia hasta los medios de comunicación. La corrupción forma parte
del sistema, porque el sistema es DICTADURA y CORRUPCIÓN.
Para seguir robando y abusando de su poder
nos quieren sumisos y callados, y quien denuncie públicamente sus trapicheos,
será tachad@ de populista, totalitari@ o violent@. Y eso lo dicen quienes
gobiernan una sociedad con seis millones de parad@s, tres millones de niñ@s
pobres, l@s que cambian leyes a golpe de decretazo, se niegan a depurar los
crímenes franquistas, l@s que desmantelan servicios sociales mientras rescatan
a bancos y empresas privadas con nuestro dinero y los mismos que convierten al
Estado español en líder en represión política en Europa. L@s golpistas no somos
el pueblo que rodeamos pacíficamente el Congreso. L@s golpistas están dentro
del Congreso arropados por Felipe VI, el gran dictador.
Seguimos y seguiremos movilizándonos en
las calles creando el poder popular necesario para dar inicio a los Procesos
Constituyentes que nos traigan IGUALDAD y LIBERTAD. Porque es nuestro derecho y
nuestra obligación como pueblo romper con la delegación del poder en otr@s que
nos ha llevado a esta autocracia, porque SÍ hay otra forma de organizar a la
sociedad y porque nos merecemos una existencia digna.
Por todo ello os convocamos a tod@s a
salir a las calles el día 4 de octubre a rodear el Congreso de los Diputados a
las 19h. ¡Por
libertad! ¡Por la emancipación popular!